Innovación y Cambio

Sabemos que la innovación es un proceso de gestión de cambios específicos, en ideas, prácticas o instrumentos, hasta su consolidación. El cambio en las personas, en las ideas y actividades, en las relaciones, en el modo de actuar o de sentir, en el modo de actuar o de sentir, es el mejor indicador de su innovación.

Por ello la innovación y el cambio son dos términos que reflejan las transformaciones que se suceden con rapidez en todos los sectores de la actividad humana, relaciones sociales y laborales, ciencia y técnica, cultura y educación, etc.
Particularmente en el campo educativo las innovaciones se presentan como un tema polémico, por tener muy amplio alcance y ámbitos de actuación como son los aspectos didácticos, de organización y gestión institucional, de formación del profesorado, etc.

Desde esta perspectiva las innovación, es una estrategia de cambio dentro del contexto de un proceso de modernización de la educación en el país, particularmente en los ámbitos adecuados, enmarcado en las actividades de innovaciones pedagógicas, tratando de impulsar y potenciar la capacidad de propuesta innovadora de los docentes, como producto de la práctica de los Instituciones Educativas dirigidos a mejorar la calidad educativa.

Entonces nuestro país no es ajeno a los cambios que está experimentando el mundo y América Latina, derivados del rol más prominente de los mercados en la sociedad civil, cuyas demandas transforman el significado de lo público. La afectación de estos cambios es en todo orden, y desde luego en la educación que por ser uno de los servicios vitales del estado, ha adquirido en este escenario un valor crítico pero a la vez estratégico, pues debe responder a estos restos desde la perspectiva de un cambio de sistema, en el que su rol estratégico es superior al agotamiento del actual modelo y de sus limitaciones.

El mundo actual, caracterizado por los rápidos cambios tecnológicos y científicos, la comunicación y la informática, etc., necesita de una educación de calidad, capaz de mejorar el desarrollo de las capacidades humanas, formando ciudadanos más participativos, reflexivos, creativos y con valores éticos sólidos.

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